martes, 2 de marzo de 2010

Notas de un viaje a Chiapas

…que rico es disfrutar lo más básico, lo más elemental de la cocina de nuestras cultura ancestral!

…a veces le queremos agregar tanto a las cosas para hacerlas mejores, tanta tecnología o tanto estudio…que se nos olvida lo más básico…
Hace un mes pase unos días en uno de los estados más bellos del país… el estado de Chiapas.

¡Qué lugares tan bellos, que arboles de la selva Lacandona, que ciudades mayas englutidas en la Selva, que cascadas, ríos, montañas fantásticas!

Uno llegando y aventurándose por todo el estado se transporta a otros universos, a otros tiempos por momentos.

Igual cuando en ciertos pueblitos en casa del habitante comías unas tortillas de verdadero maíz cosechado por ellos mismos en su jardincito o en su parcela…todo cocinado con leña en comales o estufas rudimentarias…con poquitos frijoles negros inmejorables, queso fresco de la casa, una salsa hecha al momento rápidamente en molcajete…un banquete verdadero…le agregas un poco de aguacate machacado con sal, chilito y poco polvo de pepita de calabaza tostado al comal de leña, BUENISISISISMO. Unos tragos de destilado de maíz el “poch”…que mas quieres.

El sabor estaba en su máxima expresión, la calidad de los ingredientes superb…mas organico no podía ser. El modo y la destreza en la preparación simplemente extraordinario…

Hay que comer esto ahí mismo, hay una magia, una misticidad, la cual es parte de lo que comes…te la da el momento, el lugar, la persona quien te está preparando…esto no lo transportas a ningún restaurante!

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